Con acciones de difusión y torneos en modalidad mixta (duplas con un integrante en silla de ruedas y otro convencional), la disciplina apunta a su desarrollo y a convertirse en una opción deportivo-recreativa válida para personas con dificultades de movilidad.
El emblemático complejo Los Naranjos se convirtió recientemente en el epicentro del pádel adaptado, con un torneo promocional desarrollado en la modalidad mixta, con presencia de jugadores de diversos puntos del país.
Coordinado por el santafesino José Luis “Pepe” Castricini, oriundo de la localidad de Bombal, se realizó bajo un formato que empezó a utilizarse con éxito el año pasado, en Pehuajó, donde el pádel adaptado (en silla ruedas) cuenta con gran actividad.
Según el propio Castricini, como se trata de un deporte amateur y casi todos los jugadores son de localidades diferentes, se plantean las dificultades de traslado para poder reunirse y entrenar. Entonces, se implementó esta modalidad mixta, que consiste en binomios con un jugador en silla de ruedas y una jugadora convencional de sexta categoría (después de varias pruebas, el estándar de sexta femenina o séptima masculina es el que mejor se amoldó a las posibilidades de ambos integrantes de la dupla).
Lógicamente, los jugadores en silla de ruedas cuentan con dos piques y la jugadora convencional, con uno solo, antes de impactar la pelota. Los dos piques y el saque hasta a la altura del hombro (en el pádel tradicional se permite sólo hasta la cintura), son las únicas diferencias. El resto, puntuaciones, extensión de los partidos, es todo igual.
“Estamos muy agradecidos a Ramiro Nanni, el dueño de Royal Pádel, que nos auspicia, y también al ‘Chino’ (Facundo Mazzuchi), quien nos cedió las instalaciones de Los Naranjos para que pudiéramos hacer este torneo. Fue el cuarto bajo esta modalidad. Los tres anteriores fueron también muy buenos. Nuestra intención principal es difundir el pádel en silla de ruedas, para que muchos chicos y chicas con problemas de movilidad conozcan el deporte y se acerquen. De hecho, durante el torneo en Mar del Plata se enganchó un chico, Andrés, que ya comenzó a entrenar. Esa es la idea, que más gente se sume”, explicó Castricini.
La mayoría de los jugadores actuales de pádel adaptado provienen del tenis en silla de ruedas. Y aunque el número de practicantes todavía no es muy elevado, el año pasado se formó un seleccionado nacional para participar en el I Campeonato del Mundo de la especialidad.
“Viajamos tres parejas y un entrenador a España, en mayo. Obtuvimos el cuarto puesto entre siete países y aprendimos un montón. España tiene un circuito nacional muy grande de pádel adaptado, con muchos jugadores y jugadoras. Y ya estamos pensando en el segundo Mundial, que será en 2025, porque la Federación Internacional no autorizó a hacerlo todos los años, entonces será cada dos”, aclaró Castricini.
Con pasos firmes y seguros, el objetivo para 2024, impulsado por el pehuajense Guillermo Camusso, es poder concretar un circuito bajo la órbita de la Asociación de Pádel Argentino (APA), que tenga tres o cuatro fechas. El año pasado se hizo el primer Torneo Nacional, en Roldán, Santa Fe, y fue un éxito.
Por último, en relación al certamen de modalidad mixta disputado en Los Naranjos, contó con la participación de siete binomios. Se coronaron campeones Diego Moliner y Rocío Carretero, y subcampeones resultaron Guillermo Camusso y Dolores Alemano. También participaron Diego Galeano-Celina Sáez, Alfonso Wooley-Luciana Latorre, José Luis Castricini-Agustina García, Guillermo Camusso-Yanina Di Bin y Ruth Vicente-Chacota Lescano.
Para conocer más y/o acercarse a esta actividad, visitar en Instagram @padel_adaptado_argentina o @asociaconespiral